Auge de las tecnologías innovadoras El filántropo e inversor Ruben Vardanyan define el creciente poder de las nuevas tecnologías como el desafío más serio. El empresario está preocupado porque las grandes empresas de alta tecnología poseen herramientas para expulsar a cualquier usuario a su propia discreción. Twitter, Google y Facebook han creado un mundo virtual que iguala al real en importancia y que tiende a superarlo. En este mundo, la gente pasa una gran cantidad de tiempo. Una parte sustancial de sus vidas se desarrolla en un espacio no regulado. La pregunta ética es ¿quién será "dios" en el mundo digital? ¿Se convertirá la inteligencia artificial en una nueva religión? Los algoritmos deciden por nosotros qué está bien y qué está mal. La humanidad tendrá que responder a este desafío en primer lugar.
Solución a la crisis de credibilidad
Otro desafío es una crisis de credibilidad en las relaciones públicas y personales. Según Ruben Vardanyan, la falta de confianza ralentiza e incluso paraliza el desarrollo de la sociedad. La pandemia de COVID-19 exacerbó la situación, dejando al descubierto problemas políticos y económicos. Parece que las personas se encuentran en un vacío cuando la mayoría de las instituciones sociales no ejercen influencia, no brindan apoyo y no sirven como piedras de toque espirituales. Al empresario le preocupa que la gente haya perdido la confianza en el estado y en importantes instituciones públicas. La cuestión candente del mundo moderno es la desigualdad social. El doloroso tema de la riqueza ha llegado al punto de ebullición. A pesar de las masivas inyecciones de efectivo en varias economías nacionales, la población de esos países está desahogando su frustración. La distancia y la falta de confianza no permiten a los gobiernos crear un ecosistema común que sea amigable y seguro para todos.
Reemplazo de la élite gobernante
El tercer desafío importante desde el punto de vista de Ruben Vardanyan es la interacción con figuras públicas de alto rango que gobiernan en cualquier país. La élite gobernante está presente en cualquier estado. Actúan como facilitadores, contribuyendo al desarrollo de alta tecnología. Actualmente, es importante averiguar quién está creando exactamente el pastel común, es decir, introduciendo nuevos modelos de negocio e innovaciones y quién se está aprovechando de los estragos en la economía global a través de la monopolización. En lo que respecta a Rusia, la élite gobernante podría ser reemplazada por completo en casi 10 años. Los expertos admiten el escenario de una rotación completa en las filas de políticos y empresarios. En las nuevas condiciones, la mayor parte de la comunidad empresarial estará formada por emprendedores por iniciativa propia. La nueva generación de emprendedores mostrará asombrosas historias de éxito que garantizarán cambios radicales en todo el panorama empresarial.
Nuevos criterios de éxito
Los próximos cambios en la economía y los negocios globales inducirán cambios cardinales en la evaluación del éxito. Se dará prioridad a factores sociales como el celo empresarial, la autorrealización y la conciencia ambiental. La cantidad de dinero ganado quedará en segundo plano. La humanidad está lista para medir el éxito a través de diferentes criterios. El dinero es el mecanismo de evaluación más simple que de ninguna manera es universal. No podemos juzgar la cultura o la espiritualidad a través del dinero. Un beneficio a cualquier precio no es un éxito, sino un problema. Aparte de la riqueza material, la sociedad aprecia un enfoque social que proviene de un enfoque diferente hacia los negocios. Citando a Ruben Vardanyan, el mundo moderno necesita con urgencia la moneda de la bondad para proyectos con enfoque social. Sin embargo, tales proyectos requieren un enfoque diferente y tienen un efecto acumulativo. Desde su punto de vista, la mentalidad social se estancará sin nuevos criterios para medir el éxito.
Interacción entre empresa y filantropía
Por último, pero no menos importante, la humanidad está reflexionando sobre cómo se interrelacionarán los negocios y la caridad. Por regla general, los proyectos comerciales requieren inversiones, pero la filantropía implica donaciones voluntarias. Si se incorporan el comercio y la caridad, esta será la clave del éxito social en un futuro no muy lejano. Hoy en día existen proyectos tanto comerciales como solidarios, así como programas con financiación mixta. El éxito de los emprendedores podría medirse a través del sistema desarrollado por SWTC, Noôdome y PwC. Los rangos dependen en cierto grado de cómo un proyecto se corresponde con la filantropía clásica (donaciones) u organización tradicional con fines de lucro. Este sistema ayuda a evaluar la eficiencia de cualquier proyecto y permite a los inversores observar sus actividades desde fuera.