El jueves, el mercado australiano registró una ligera subida, compensando parte de las importantes pérdidas sufridas durante la sesión anterior. Esto se produce tras las ambiguas indicaciones de Wall Street. El S&P/ASX 200 primario se mantuvo justo por debajo de la marca de 7.600, con un aumento del valor de las mineras de oro y de las existencias financiadas ligeramente socavado por el descenso de las acciones financieras y tecnológicas.
El índice estándar S&P/ASX 200 ganó 9,40 puntos, o un 0,12%, y se situó en 7.579,30 puntos, tras alcanzar un máximo anterior de 7.589,00 puntos. El índice All Ordinaries, más amplio, subió 10,90 puntos, o un 0,14%, y se situó en 7.842,80 puntos. Las acciones australianas habían terminado notablemente a la baja el miércoles.
Las mineras Rio Tinto y Fortescue Metals registraron ligeros descensos del 0,2 al 0,4 por ciento cada una, mientras que BHP Group experimentó una pequeña subida del 0,1 por ciento y Mineral Resources ganó casi un 1 por ciento.
Las acciones petroleras registraron descensos, con Woodside Energy cayendo más de un 1 por ciento. Por su parte, Origin Energy, Beach Energy y Santos bajaron casi un 1% cada una.
En el sector tecnológico, el propietario de Afterpay, Block, experimentó un descenso significativo de más del 7 por ciento, mientras que Xero cayó un 0,3 por ciento y Zip experimentó un descenso de más del 1 por ciento. Por el contrario, Appen ganó casi un 1% y WiseTech Global se mantuvo estable.
Entre los "cuatro grandes" bancos, Commonwealth Bank, ANZ Banking y National Australia Bank subieron casi un 1% cada uno, y Westpac ganó un 1,5%.
Mineras de oro como Evolution Mining aumentaron un 1,5 por ciento, Resolute Mining avanzó más de un 4 por ciento y Gold Road Resources creció casi un 3 por ciento. Además, Newmont aumentó casi un 1 por ciento y Northern Star Resources subió casi un 2 por ciento.
Otros cambios destacables fueron la caída del 31% de las acciones de Bapcor tras la rebaja de las previsiones de beneficios, y la de Woolworths, cuyas acciones cayeron un 4% tras unos resultados que no alcanzaron las estimaciones de los analistas.
En el mercado de divisas, el dólar australiano cotizaba a 0,652 dólares el jueves.
En medio de unos resultados mediocres, el anuncio de la política monetaria de la Reserva Federal estadounidense provocó una gran volatilidad en Wall Street. Tras una subida inicial en respuesta al anuncio, los principales promedios cayeron hacia el final. El Dow subió un 0,2%, mientras que el Nasdaq cayó un 0,3% y el S&P 500 un 0,3%.
El índice británico FTSE 100 también bajó ligeramente, un 0,3%, mientras que otros mercados europeos importantes permanecieron cerrados.
Por último, los precios del crudo cayeron a mínimos de siete semanas tras el inesperado aumento de los inventarios de crudo estadounidenses de la semana pasada. Los futuros del crudo West Texas Intermediate para junio cerraron a 79,00 dólares el barril, marcando la liquidación más baja desde el 12 de marzo.