FX.co ★ EUR/USD. Resultados de la semana. Contradictorio BCE, "la superación china" y crecimiento de la inflación en EE.UU.

El par euro-dólar terminó la semana en 1,0658. Por primera vez desde mayo de este año, el precio se ha consolidado dentro de la sexta cifra, confirmando así la fortaleza de la tendencia bajista. Observemos el gráfico semanal del par eur/usd: por novena semana consecutiva, el par ha seguido una tendencia hacia el sur. No ha habido una sola vela alcista en el marco temporal W1 desde mediados de julio. El principal impulsor de la caída es el billete verde, que está reforzando sus posiciones debido al favorable trasfondo fundamental.

El flujo de noticias es inestable, pero los alcistas del dólar consiguen extraer sus beneficios en cualquier circunstancia. A mediados de verano, la divisa estadounidense recibió el apoyo de la Reserva Federal, que subió inesperadamente las tasas en contra de los pronósticos de la mayoría de los expertos, que preveían el mantenimiento del statu quo. Después se publicaron los datos de julio sobre el crecimiento de la inflación en EE.UU., que también sorprendieron a los operadores por su "color verde". La intervención de Jerome Powell en el simposio de Jackson Hole no hizo sino reforzar las expectativas de línea dura del mercado, ya que permitió otra ronda de subidas de tasas dentro de este año. Después, la atención se centró en China, que alarmó a los mercados por la ralentización de su economía. En la ola de sentimiento anti-riesgo, el dólar volvió a estar muy solicitado. En cuanto China "se corrigió" (el bloque de estadísticas macroeconómicas de agosto salió en " zona verde ", y el Banco Nacional de China tomó una serie de decisiones de estímulo), el mercado del petróleo subió de inmediato, lo que "alegró" a los toros del dólar con el crecimiento de las principales cotizaciones.

Así es como el billete verde ha estado subiendo durante muchas semanas en modo "paso a paso" (el índice dólar se acercó a los límites de la cifra 105), mientras que los vendedores del par eur/usd, por su parte, bajaban animadamente.

La semana pasada resultó significativa en muchos sentidos para los operadores del par.

El Banco Central Europeo, con su decisión de línea dura, puso si no un punto, al menos un "signo de interrogación" en relación con sus acciones futuras. Las perspectivas de un mayor endurecimiento de la política monetaria del Comité de Política Monetaria están ahora bajo un gran signo de interrogación, ya que el regulador subió las tasas de interés en un contexto de desaceleración de los principales indicadores macroeconómicos. Se trata de una decisión bastante audaz, lo que se denomina "a pesar de". Por eso, el euro reaccionó a las acciones del Banco Central con una caída generalizada: los operadores dudan de que el BCE decida endurecer de nuevo la política en un futuro próximo (al menos en el año en curso).

Parte de la redacción de la declaración adjunta también indica que el Banco Central está dispuesto a hacer una pausa. En particular, el documento afirma que las tasas de interés "ya han alcanzado un nivel que contribuirá significativamente al retorno oportuno de la inflación al objetivo - si se mantiene en este nivel durante un período de tiempo suficientemente largo". Traducido al lenguaje humano, esto significa que el Banco Central Europeo está dispuesto a ponerse a la defensiva durante muchos meses, manteniendo las tasas en el nivel alcanzado.

Por cierto, tras la reunión, Madis Muller, representante del BCE, afirmó que "no se esperan subidas de tasas en los próximos meses". Al mismo tiempo, dejó claro que el regulador volverá a endurecer el CPM sólo si los indicadores de inflación empiezan a "acelerarse activamente". Una postura similar manifestaron el vicepresidente del BCE, Luis de Guindos, así como el director del Banco Central de Eslovaquia, Boštjan Vasle. Por lo tanto, a pesar de la tesis declarada por el regulador de que las tasas no han alcanzado su nivel máximo, el mercado ha llegado a la conclusión contraria. En concreto, según los expertos de SocGen, el Banco Central mantendrá este año una actitud de espera. Dicho esto, los estrategas de divisas no descartan otra subida de las tasas en el primer semestre del año próximo, ya que los elevados costes laborales unitarios podrían dar lugar a una inflación básica persistentemente alta.

Pero las perspectivas agresivas para 2024 no calientan a los compradores del par eur/usd: el Banco Central Europeo no se ha convertido en un aliado del euro, a pesar de la inesperada subida de las tasas de interés.

Si la Fed se convertirá en aliada del dólar es una incógnita. Los últimos informes sobre el crecimiento de la inflación en EE.UU., con el crecimiento del mercado del petróleo como trasfondo, apuntan a que el regulador estadounidense endurecerá su retórica en la reunión de septiembre, y posiblemente anuncie una subida de tasas en la próxima reunión de noviembre. Así, el índice general de precios al consumo en términos anuales se aceleró hasta el 3,7%, con una previsión de crecimiento del 3,6%. El índice muestra un movimiento al alza por segundo mes consecutivo tras un ciclo de 12 meses a la baja. En términos mensuales, el IPC subió al 0,6%, la mayor tasa de crecimiento desde junio de 2022. El índice de precios al consumo subyacente sigue bajando de forma programada. En base anualizada, se situó en el 4,3% (el resultado coincidió con la previsión), la tasa de crecimiento más débil desde octubre de 2021.

Otro indicador de la inflación, el índice general de precios de producción, también se situó en la "zona verde": se aceleró por segundo mes consecutivo tras casi un año de descensos consecutivos. El índice de precios de importación también superó las previsiones, tanto en términos mensuales como anuales.