Según Ole Hansen, Jefe de Estrategia de Materias Primas de Saxo Bank, la economía estadounidense entrará en un periodo de crecimiento muy lento junto con una inflación persistente en 2024, lo que significa que es probable que los metales preciosos como el oro y la plata empiecen a subir con fuerza.
Saxo Bank ajustó recientemente sus previsiones económicas para EE.UU. en 2024 para reflejar que podría producirse una estanflación, caracterizada por un crecimiento económico lento unido a una inflación persistente.
Ole Hansen basó sus observaciones en la enorme subida de las tasas de interés reales, que ha hecho que el coste de la financiación para EE.UU. sea muy elevado y ha contribuido a la rebaja de la calificación crediticia de EE.UU. por parte de Fitch.
Ole Hansen también señaló el significativo aumento del gasto de los consumidores debido a las tasas de interés, que afecta a las tarjetas de crédito, los coches nuevos y las hipotecas. Explicó que esta combinación de bajo crecimiento e inflación moderadamente alta apunta a una estanflación. Y que es probable que la Reserva Federal se vea obligada a recortar las tasas de interés incluso antes de que se alcance el objetivo medio de inflación del 2%. Esto obligaría al FOMC a elevar su objetivo al 3%, lo que conduciría a una reevaluación de las futuras expectativas de inflación.
Durante los periodos de estanflación, determinadas materias primas atraen cada vez más la atención como defensa contra la inflación y diversificación de la cartera. Un dólar más débil puede hacer que las materias primas denominadas en dólares sean más accesibles para los compradores no vinculados al dólar, aumentando potencialmente la demanda y los precios. También son atractivas porque pueden proporcionar rendimientos reales positivos, incluso cuando la inflación menoscaba los rendimientos de las inversiones tradicionales. Esto es particularmente perceptible cuando los precios de las materias primas suben debido a limitaciones de la oferta o a una elevada demanda.
Durante la estanflación, algunas materias primas, y especialmente los metales preciosos como el oro y la plata, pueden beneficiarse. Lo mismo puede decirse de los metales industriales.
Por lo tanto, los inversores que deseen invertir en materias primas durante la estanflación deben ser selectivos y diversificar su cartera en diferentes sectores y regiones.