FX.co ★ Resultados del Simposio de Jackson Hole

El euro y la libra reaccionaron a la baja después de que el presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, dejara claro el viernes que las tasas de interés se mantendrán altas y podrían subir más si la economía y la inflación no se enfrían. Sin embargo, los toros no tardaron en detectar los mínimos mensuales.

En un discurso muy esperado el pasado viernes en la conferencia anual del banco central estadounidense en Jackson Hole, Powell hizo hincapié en que el trabajo de la Fed en materia de inflación aún no ha concluido, al tiempo que señaló avances en la ralentización del crecimiento de los precios. También dijo que el banco central procedería con cautela, dejando que la Fed mantuviera las tasas en su próxima reunión de septiembre, después de haberlas elevado en julio a un máximo de 22 años. En términos más generales, el discurso de Powell puso de manifiesto que la política se está orientando cada vez más hacia la gestión del riesgo en medio de una considerable incertidumbre sobre el impacto de las subidas anteriores y la evolución actual de los precios y el mercado laboral.

Dicho de otro modo: todo lo que los inversores esperaban, fue dicho, ni más ni menos. Obviamente, la propia Reserva Federal desearía poner fin a este duro ciclo, ya que la crisis bancaria que estalló esta primavera, aunque se ha extinguido, podría estallar con renovado vigor en cualquier momento, como nos han advertido repetidamente diversos economistas. Los problemas de crédito tampoco han desaparecido, y si a todo ello añadimos la ralentización y contracción de la actividad en la economía estadounidense, que nos señalaban claramente hace poco los índices PMI, hay menos confianza en un futuro brillante y en que EE.UU. pueda evitar la recesión el año próximo.

Por otro lado, la Fed ha advertido repetidamente que hasta que no vean que la economía se ralentiza tanto como desearían, es poco probable que recurran a hacer cambios significativos en la política monetaria. Dado que la economía está mostrando resistencia, incluso vista en el segundo trimestre, y el desempleo sigue siendo bajo, no hay nada sorprendente en las declaraciones del viernes de Powell.

Incluso si la Fed renuncia a subir las tasas en septiembre, es poco probable que los responsables políticos anuncien el fin del endurecimiento en el corto plazo. Sí, algunos funcionarios de la Fed ya discrepan sobre la necesidad de subir más las tasas, pero todos expresan opiniones similares sobre la necesidad de al menos mantener las tasas altas durante bastante tiempo.

"No apretar lo suficiente sería un error peor que subir más las tasas, porque podemos ajustar nuestra política en cualquier momento", dijo la presidenta de la Reserva Federal de Cleveland, Loretta Mester, en una entrevista la semana pasada. "Vamos a mantener el mismo rumbo en términos de nuestra política monetaria, asegurándonos de que la inflación baje de forma más agresiva".

Ante el discurso de Powell, que se ajustó a las expectativas, los operadores tuvieron la oportunidad de realizar una corrección al alza en los activos de riesgo.

En cuanto al panorama técnico actual del par EURUSD, el mercado bajista no se ha ido a ninguna parte. Los compradores necesitan mantenerse por encima de 1,0805 para recuperar el control. Esto permitirá volver a 1,0835. Ya desde este nivel es posible subir a 1,0875, pero será bastante problemático hacerlo sin el apoyo de los grandes operadores. En caso de un retroceso del instrumento comercial, sólo en la zona de 1,0805 y 1,0770 espero alguna acción seria por parte de los grandes compradores. Si no hay nadie, sería bueno esperar una actualización del mínimo de 1,0740, o abrir posiciones largas desde 1,0705.

En cuanto al panorama técnico del par GBPUSD, la presión sobre el par se mantiene. Podemos contar con un fortalecimiento sólo después de controlar el nivel de 1,2610. La vuelta de este rango devolverá la esperanza de una recuperación hasta la zona de 1,2650, tras lo cual podremos hablar de una ruptura al alza más pronunciada de la libra hasta la zona de 1,2690. Si el par cae, los osos intentarán tomar el control de 1,2580. Si lo consiguen, una ruptura de este rango asestará un duro golpe a las posiciones de los toros y empujará al par GBPUSD al mínimo de 1,2545 con la perspectiva de alcanzar 1,2480.