El par AUD/USD cotiza en el rango 0,6700 – 0,6780, moviéndose hacia adelante y hacia atrás entre los límites. El dólar australiano está esperando la reunión de marzo del Banco de la Reserva de Australia el martes 7 de marzo.
Estimaciones de expertos
El escenario base para la próxima reunión asume otra subida de tasas de interés de 25 pb. Este escenario ya se ha tenido en cuenta, por lo que el mercado se centrará en nuevas perspectivas de ajuste monetario. Los datos macro recientes que se publicaron en Australia permiten que el banco central baje el tono de su retórica. Si ese es el caso, el par estará bajo una presión significativa. Por otro lado, el RBA demostró una postura dura en su reunión de febrero, como lo indica el acta de la reunión. Por lo tanto, todavía hay cierta intriga sobre el resultado de la reunión de marzo.
Según una encuesta de Reuters, 27 de 28 economistas creen que el RBA impulsará una subida de tipos de 25 pb en marzo. Uno de los expertos encuestados apuesta por una subida de 15 puntos. En realidad, no hay intriga aquí: el aumento de 25 pb fue ampliamente anunciado por los representantes del RBA durante las semanas anteriores.
En cuanto a otras perspectivas, las opiniones de los analistas estaban divididas. Casi la mitad de los economistas entrevistados expresaron su confianza en que el RBA aumentará las tasas en 25 pb en el segundo trimestre. El resto de los economistas apuestan a otra ronda de alzas de 25pb en mayo (en cuyo caso el punto final quedaría en 4,10 %).
Vale la pena señalar que el sentimiento agresivo dominó el mercado hace unas semanas. Pero los datos macro más recientes hicieron que los operadores dudaran de que el banco central muestre una determinación entusiasta.
Los datos no están a favor del aussie
El indicador mensual del Índice de Precios al Consumidor (IPC) aumentó 7,4 % en el año hasta enero de 2023, mientras que la previsión era de una caída a 8,1 %. La desaceleración del crecimiento inflacionario se debió a un débil aumento de los precios de los combustibles, así como de los precios de los alimentos.
Otro dato importante también resultó estar en zona roja. La economía australiana creció solo un 0,5 % en el cuarto trimestre de 2022 en comparación con los tres meses anteriores. Este resultado fue inferior al previsto (la mayoría de los expertos esperaba ver un crecimiento del 0,8 %).
Poco antes también se habían publicado datos clave del mercado laboral que también decepcionaron a los participantes del mercado. La tasa de desempleo en Australia subió al 3,7 %, mientras que el empleo neto cayó 11.500 (la previsión era un crecimiento de 20.000).
Es decir, los principales datos macro que se han publicado desde la reunión de febrero han dejado más preguntas que respuestas. Por lo tanto, el tono de la retórica del RBA (en primer lugar, se refiere al texto de la declaración adjunta) puede suavizarse, en el contexto de nuevas perspectivas de ajuste monetario. Es probable que el banco central vincule sus próximos pasos a la tasa de inflación y otros indicadores macroeconómicos, pero no abandonará formalmente su postura agresiva.
El gobernador del RBA, Philip Lowe, dijo recientemente que su prioridad era hacer que la inflación volviera al nivel objetivo, por lo que se requerirían más aumentos de las tasas de interés en el "futuro cercano". Sin embargo, estas palabras se dijeron incluso antes de la publicación del informe del IPC de enero. Por un lado, la inflación en Australia sigue siendo inaceptablemente alta, pero por otro lado, la tasa de caída del IPC se ha acelerado sustancialmente. Si este hecho jugará un papel decisivo en el contexto de suavizar la retórica de Lowe es una pregunta abierta.
Conclusiones
Dado el alto grado de incertidumbre, los operadores del par no tienen prisa por abrir grandes posiciones. El rango de precios de 0,6700-0,6780 es un territorio cómodo tanto para los alcistas como para los bajistas.
Por ejemplo, el viernes, el par mostró una tendencia alcista por la mañana en medio de un sentimiento de riesgo intensificado en los mercados. Pero durante la sesión de EE. UU., el dólar australiano se dio por vencido, luego de la publicación del PMI de servicios ISM. El índice estaba en zona verde, en 55,1, es decir, casi al nivel de enero (55,2). Mientras que la mayoría de los expertos pronosticaron un descenso hasta los 54,5 puntos. Este hecho hizo posible que los bajistas lanzaran un contraataque, pero el par aún se mantuvo dentro del rango de precios antes mencionado.
Podemos suponer que el dólar australiano se mantendrá en este rango hasta el anuncio de los resultados de la reunión del RBA en marzo.