La depresión de la variante Delta que cubrió los mercados el lunes ha pasado a un segundo plano, ya que los reportes victoriosos de las empresas, que informan ganancias trimestrales, eleva los mercados de valores, lo que estimula un retorno de la demanda de riesgo. El índice del dólar sigue creciendo en gran parte debido a la debilidad del euro, después de la reunión del BCE, pero las divisas de materias primas ya se sienten notablemente mejor. Mientras tanto, los rendimientos de los bonos están disminuyendo en todo el mundo.
El plan de infraestructura de Biden no pasó la etapa de una votación en el Senado, pero el presidente de Estados Unidos asegura que el plan será adoptado la próxima semana después de algunas mejoras. Este evento puede dar al dólar estadounidense un impulso positivo adicional.
Un ligero retroceso en el sentimiento se considera temporal. Hoy, toda la atención se dirigirá a los informes de actividad empresarial (Markit PMI), pero cualquier movimiento es posible solo en caso de desviaciones notables de los pronósticos.
EUR/USD
La reunión del BCE del jueves convirtió al euro en la moneda más débil del último día y, aunque logró mantenerse en la zona de consolidación, sus perspectivas han empeorado. La declaración del BCE, denominada "orientación revisada sobre las tasas de interés", a la que se opusieron dos miembros del Consejo de Gobierno, a saber, el alemán Weidmann y el austriaco Wunch, dice: "El Consejo de Gobierno espera que las tasas de interés clave del BCE se mantengan en el nivel actual o más bajo hasta que vea que la inflación llegue al dos por ciento mucho antes del final de su horizonte de pronóstico y se mantendrá hasta el final del horizonte de pronóstico".
En otras palabras, el BCE ha dejado claro que no se debe esperar absolutamente ninguna acción dura de su parte, ya que incluso un aumento de la inflación todavía no significará que se haya vuelto permanente. La recuperación económica avanza según lo previsto, pero el empleo está unos 3,3 millones por debajo del nivel anterior a la crisis, y la temporalidad de la inflación se explica por la fuerte influencia de la energía y el aumento del impuesto al valor agregado.
El presidente del BCE, Lagarde, confirmó en rueda de prensa que el objetivo del Banco Nacional no es mantener las tasas bajas el mayor tiempo posible, sino alcanzar la meta de inflación. No obstante, los cambios realizados en la gestión provocaron el rechazo de dos miembros del BCE.
En cuanto a los pasos prácticos, no hay cambios aquí. El nuevo programa (pandémico) de compra de activos de emergencia PEPP debería continuar al menos hasta marzo de 2022 de acuerdo con la guía anterior, y el programa anterior de compra de activos, el mismo EC, gracias al cual el BCE infló el balance más que la Fed, debería continuar al mismo ritmo de 20.000 millones de euros al mes hasta que el BCE suba las tasas. Las tarifas, como ya hemos entendido, no subirán pronto.
En conclusión, el BCE no tiene ni tendrá planes para intensificar la salida de la política blanda. El euro se retrasará con respecto a las tendencias del mercado, y esto ejercerá una fuerte presión bajista sobre él al menos en el futuro hasta la próxima primavera.
Se ha alcanzado el nivel objetivo del euro de 1,1770 establecido el lunes. Hay incluso menos razones para una reversión alcista, por lo que estamos esperando el movimiento hacia el próximo objetivo 1,1704.
GBP/USD
La libra cayó al nivel de soporte de 1,3575. Sus perspectivas aún parecen bastante débiles y existe una pequeña posibilidad de una corrección al alza.
Los principales bancos centrales, que están ajustando su política monetaria durante este difícil período, consideran principalmente el ritmo de recuperación del mercado laboral y la inflación como parámetros clave de evaluación. El alto nivel de inflación estadounidense se debe a factores muy diferentes a los del Reino Unido. Según NIESR, es poco probable que la inflación del Reino Unido alcance los precios en los EE. UU. El modelo sugiere que el crecimiento puede aumentar temporalmente al 3%, pero una ola de declive seguirá a partir de la primavera de 2022, lo que limitará cualquier actividad del Banco de Inglaterra.
El crecimiento se limita a la zona de resistencia de 1,3830/50. Si uno intenta crecer allí, las ventas pueden reanudarse. El objetivo se establece en 1,3512, 1,3475 y el de largo plazo es 1,3161, lo que representa una corrección del 38,2% con respecto al crecimiento de 2020/21.