Según el periódico alemán Bild am Sonntag, la filial de Lufthansa, Eurowings, reclama a los activistas climáticos de Last Generation una compensación de 740.000 euros por las pérdidas causadas por las protestas organizadas en varios aeropuertos alemanes.
Lo activistas climáticos que protestaban contra el uso de combustibles fósiles interrumpieron durante varias horas las operaciones en los aeropuertos de Hamburgo, Düsseldorf y Berlín. En este sentido, la dirección de Lufthansa anunció que acudirá a los tribunales para reclamar daños y perjuicios por vuelos cancelados y retrasados. Las compañías aéreas chárter Condor y Tuifly hicieron lo mismo. También exigieron una compensación por los disturbios causados por los activistas climáticos en el aeropuerto de Dusseldorf.
En este contexto, el Ministro de Transporte alemán, Volker Wissing, advirtió sobre enmiendas a la ley que endurecerían las sanciones por este tipo de protestas. "Bloquear aeropuertos para impedir que funcionen va mucho más allá de una protesta legítima. No se trata de ofensas menores", afirmó.
En particular, 57 vuelos del grupo Lufthansa y 8.500 pasajeros se vieron afectados por las protestas en el aeropuerto de Hamburgo el 13 de julio de 2023. Esto causó un total de 400.000 euros en daños financieros. Posteriormente, la empresa envió cartas a diez acusados exigiendo una indemnización. El mismo día se cancelaron 24 vuelos en el aeropuerto de Dusseldorf. Los daños ascendieron a 220.000 euros. Los demandados en esos dos casos fueron condenados a pagar una indemnización en un acuerdo extrajudicial. Anteriormente, en noviembre de 2022, las protestas paralizaron el tráfico aéreo en el aeropuerto de Berlín-Brandenburgo, lo que provocó la cancelación de 35 vuelos. Según los informes, la aerolínea alemana envió una factura de 120.000 euros a seis acusados.