​La economía estadounidense, ¿se encamina hacia una recesión? No, no es así. ¿Por qué te andas con rodeos entonces?

La economía estadounidense vuelve a verse sacudida por rumores de recesión. Esto pone nerviosos a los inversores de todo el mundo. Sin embargo, los expertos reconfortan a los participantes en el mercado: ¡no se preocupen, todo va bien! Pero los inversores siguen teniendo sus dudas.

Según Sergio Ermotti, Consejero Delegado de UBS, el mayor banco suizo por capitalización, «es demasiado pronto para hablar de que la economía estadounidense está entrando en recesión». Según el experto, tal estado «se caracteriza por un descenso constante de la producción nacional o una disminución constante de las tasas de crecimiento del PIB». Sin embargo, ahora no hay señales de este tipo, subraya S. Ermotti.

Actualmente no se dan las condiciones previas para una recesión, está seguro el experto: «Los indicadores macroeconómicos no son lo suficientemente claros, por lo que es prematuro hablar de recesión».

Además, la dirección de la Fed dispone de herramientas suficientes para estabilizar la situación en el mercado nacional. No se descarta que el regulador las utilice en un futuro próximo. Los estrategas de divisas de UBS creen que a finales de 2024 el banco central estadounidense reducirá las tasas de interés en al menos 50 puntos básicos.

Sin embargo, en la segunda mitad de 2025, la volatilidad del mercado bursátil estadounidense podría aumentar significativamente. Según S. Ermotti, en esta dinámica pueden influir muchos factores, como la creciente tensión geopolítica en el mundo y el deterioro de la situación macroeconómica en EE.UU.

Anteriormente, expertos de JPMorgan Chase, uno de los mayores bancos del mundo, afirmaron que existe una alta probabilidad de que «la economía estadounidense entre en recesión a finales de 2024». Según las estimaciones de los analistas, pasará del 25% al 35%. En JPMorgan Chase permiten la aplicación de un escenario negativo, que prevé una desaceleración constante del crecimiento del PIB de EE.UU. en la segunda mitad de 2025. Los expertos del banco estiman la probabilidad de tal evolución en un 45%.