El petróleo bajó ligeramente en la sesión estadounidense de ayer,
ya que EE.UU. intensificó sus esfuerzos diplomáticos para tratar de detener el creciente conflicto entre Israel y Hamás y también se acercó a un acuerdo para aumentar las exportaciones de crudo de Venezuela. Aun así, la esperada ofensiva terrestre de Israel sobre la Franja de Gaza mantiene en vilo a los mercados.
Funcionarios estadounidenses han mantenido conversaciones con países de Oriente Medio, incluido Irán, que respalda a Hamás, para contener los combates.
Al mismo tiempo, Venezuela y Estados Unidos están a punto de llegar a un acuerdo por el que Estados Unidos suavizaría las sanciones impuestas a la industria petrolera venezolana a cambio de unas elecciones presidenciales más libres el año que viene, lo que podría impulsar el suministro en un mercado restringido.
El crudo West Texas Intermediate cayó el lunes por debajo de los 87 dólares el barril.
No obstante, el ministro iraní de Asuntos Exteriores declaró que la guerra se acercaba a una fase inevitable y que el peligro de un conflicto mayor había sacudido el mercado del petróleo.
El conflicto de Oriente Medio ha sacudido el mercado mundial del crudo. Se teme que la escalada ponga en peligro las exportaciones de crudo de la región, que representa aproximadamente un tercio del suministro mundial. Sin embargo, los flujos de petróleo no se han visto afectados hasta ahora.
El Secretario de Estado estadounidense, Anthony Blinken, regresó el lunes a Israel tras mantener conversaciones con funcionarios árabes, incluida Arabia Saudí.
Con la concentración de miles de soldados israelíes cerca de la Franja de Gaza, la administración Biden también ha aumentado la presencia militar estadounidense en la región.
A día de hoy, el petróleo sigue bajando por el momento.