Las expectativas revisadas sobre el aumento de la tasa del BCE impulsan el euro

Una encuesta reciente mostró que los operadores del mercado esperan que las tasas disminuyan solo en el segundo trimestre de 2024, mucho más tarde de lo previsto anteriormente. Esto significa que las tasas de interés permanecerán en el 3,75% durante al menos nueve meses.

Tal escenario está respaldado por el hecho de que la inflación subyacente, que excluye las categorías volátiles y actualmente es el indicador preferido de los funcionarios del BCE, probablemente disminuirá lentamente, permaneciendo en el 2,4% en el cuarto trimestre del próximo año. Esto es significativamente más alto que la cifra objetivo del banco del 2%.

Muchos políticos han expresado su preocupación por la naturaleza sostenible de la inflación subyacente. Anteriormente, el BCE elevó la tasa de depósito en 25 puntos básicos al 3,25%, prometiendo seguir impulsando los costos de los préstamos hasta alcanzar un nivel suficientemente restrictivo. Después de eso, el banco planea mantener las tasas altas el tiempo que sea necesario. El presidente del Banco Central de Letonia, Martins Kazaks, dijo en una entrevista que el aumento esperado de un cuarto de punto en junio y julio puede no ser suficiente para frenar la inflación. El presidente del Bundesbank, Joachim Nagel, dijo lo mismo, afirmando que el BCE puede tener que seguir endureciendo la política "después de las vacaciones de verano". Isabel Schnabel también comentó que las tasas deberían seguir subiendo hasta que haya señales de que la inflación subyacente disminuirá.

Hoy, la Comisión Europea publicará las previsiones económicas para la zona euro, y se espera una recuperación gradual adicional del PIB, con tasas de crecimiento que aumentan gradualmente al 0,4% en la segunda mitad del próximo año. Las previsiones negativas y las expectativas revisadas a la baja llevarán a una caída momentánea de los activos de riesgo, que los operadores pueden aprovechar, con el objetivo de encontrar los mínimos de la tendencia a la baja.

En términos del mercado de divisas, el euro es bajista, pero no es imposible ver crecimiento. Para ello, la cotización tiene que llegar a 1,0880, o al menos mantenerse por encima de 1,0850. Esto permitirá un aumento más allá de 1,0910, en dirección a 1,0940. En caso de una disminución alrededor de 1,0850, el euro caerá a 1,0800 y 1,0770.

En GBP/USD, los alcistas están intentando recuperar las pérdidas, pero para ver crecimiento, la cotización tiene que consolidarse por encima de 1,2475. Solo eso desencadenará una subida mucho mayor a 1,2500 y 1,2540. En caso de que haya una disminución, los bajistas