La dinámica de la moneda estadounidense depende en gran medida de la estrategia de la Reserva Federal para la tasa clave. Durante mucho tiempo, el dólar ha ocupado una posición de liderazgo gracias a la actividad de la Fed. Sin embargo, en caso de una pausa en relación con la subida de tipos por parte del banco central, el USD quedará en el limbo, según creen los expertos.
La semana pasada, los funcionarios de la Fed admitieron la posibilidad de cierta desaceleración en el proceso de subida de tipos. Según Mary Daly, directora de la Reserva Federal de San Francisco, el banco central no planea "elevar las tasas de forma permanente en un 0,75 %". Al mismo tiempo, no está en duda un aumento de la tasa de interés de 75 pb, previsto para la próxima reunión, el 2 de noviembre. Los expertos admiten que en la próxima reunión de diciembre, la Fed subirá la tasa solo 50 pb, y no 75 pb, como se esperaba anteriormente.
Tales declaraciones provocaron un aumento en el apetito por el riesgo e hicieron tropezar al dólar. El lunes 24 de octubre por la noche, el par EUR/USD, del cual los analistas esperaban una caída y una salida del triángulo convergente, subió. Habiendo superado el mínimo reciente en 0,9705, el par subió a 0,9867. El martes 25 de octubre por la mañana, el par EUR/USD continuó su tendencia alcista y llegó a 0,9873. En este contexto, el euro recibió un importante apoyo, manteniendo un impulso positivo y tratando de mantener las posiciones ganadas.
El hundimiento a corto plazo del dólar, registrado el lunes por la noche, se debe a datos macroeconómicos decepcionantes de los Estados Unidos. Recordemos que en octubre, el índice PMI compuesto de actividad empresarial en el país disminuyó a 47,3 puntos. En septiembre, este indicador fue de 49,5 puntos. Al mismo tiempo, los analistas contaban con su descenso a solo 49,3 puntos. Además, en octubre, el índice de actividad empresarial en el sector servicios en Estados Unidos se "estrechó" a 46,6 puntos (desde los 49,3 puntos anteriores), y en la industria a 49,9 puntos (en septiembre, 52 puntos). Al mismo tiempo, los expertos esperaban una ligera disminución en los indicadores (hasta 49,2 puntos y 51 puntos, respectivamente).
Muchos analistas temen que el programa de ajuste cuantitativo (QE), al que se adhiere la Fed, provoque una caída significativa en los precios de los activos. Actualmente, la Fed sigue una política de reducción de su balance en $95 mil millones por mes, abandonando los bonos del Tesoro estatal y los valores respaldados por hipotecas. Según los expertos, esto pone en riesgo a los inversionistas, ya que durante la venta de sus bonos, el banco central "absorbe" liquidez en el mercado. Esto provoca un desequilibrio y debilita la posición del dólar, según creen los expertos.
Los analistas y los participantes del mercado esperan que la Fed suba la tasa de interés por cuarto año consecutivo (en 75 pb). Muchos confían en que el banco central no detendrá este proceso hasta que la inflación baje a un nivel aceptable. Los expertos califican el actual ciclo de ajuste de la Fed como "el más agresivo de las últimas décadas" y temen que provoque una recesión en la economía global. Anteriormente, los analistas de Reuters realizaron una encuesta según la cual la probabilidad de una recesión dentro de 12 meses era del 65%. Tenga en cuenta que en la encuesta anterior, esta cifra no superó el 45%.
La moneda estadounidense se siente confiada en medio de un aumento activo en las tasas de la Fed. Los estrategas de divisas de Goldman Sachs concluyeron que si la tendencia actual continúa, el dólar alcanzará su punto máximo el próximo año. El pronóstico anterior del banco asumía un fuerte aumento del USD en 2024. Sin embargo, ahora la situación se está desarrollando a favor del dólar debido a la actitud agresiva de la Reserva Federal.
Con un nuevo aumento en la tasa de interés en 2023, el dólar recibirá un impulso adicional, confía Goldman Sachs. En 2022, gracias a la "aceleración" de la Fed con una subida de tipos (en total de 300 pb) en 2022, la moneda estadounidense superaba significativamente a sus competidores. En este contexto, alcanzar el pico del precio del USD es una cuestión de futuro cercano, cree el banco. Al mismo tiempo, los mercados esperan que en 2023 la Fed siga el rumbo elegido, y el recorte de tipos se produzca recién en 2024.
En el mediano plazo, el papel de la moneda estadounidense en el sistema financiero mundial se reducirá significativamente, según creen los expertos. Las razones son el fortalecimiento de los procesos de desdolarización en el mundo, la reducción de las reservas mundiales de divisas y el uso activo de monedas nacionales digitales. Colin Wise, economista de la Fed, que ha analizado cuidadosamente los escenarios para reducir el papel del USD como moneda de reserva global, no está de acuerdo con estas conclusiones. Según el experto, es improbable un rechazo generalizado del dólar: incluso con una fuerte reducción de su participación en las reservas mundiales (hasta 11,8%-17%), los volúmenes de USD serán el doble que los de otras monedas. Según estimaciones del FMI, en el segundo trimestre de 2022, las reservas mundiales de divisas denominadas en dólares ascendieron al 59,5% del volumen total de divisas.