El yen continúa experimentando la caída más dramática desde 1998. El jueves por la noche, el JPY colapsó frente al dólar a casi 147. Fue empujado a un nuevo mínimo por el discurso moderado del presidente del Banco de Japón.
La moneda japonesa está nuevamente atrapada en una tormenta. Por un lado, el yen ahora está bajo una fuerte presión por las expectativas de acciones más agresivas de la Reserva Federal y, por otro lado, los mantras moderados habituales del BOJ.
Ayer, el JPY cayó frente al dólar a un nuevo mínimo de 24 años en 146,80. La publicación del índice de precios al productor de EE. UU. para septiembre pesó sobre el par dólar-yen.
Las estadísticas no justificaron las previsiones de los economistas, que esperaban un aumento del 0,2%. En realidad, el IPP subió más, un 0,4 %, lo que aumentó los temores de los operadores sobre un crecimiento más sostenible de los precios al consumidor.
Los datos de inflación de EE. UU. del mes pasado se publicarán hoy. Se espera que el índice de precios al consumidor de septiembre muestre una ligera desaceleración (al 8,1% interanual).
Sin embargo, no olvidemos el giro inesperado de los acontecimientos el mes pasado, cuando las estadísticas de agosto resultaron ser peores de lo esperado. Esto fortaleció significativamente la determinación agresiva de la Fed y provocó un salto en el par USD/JPY.
"Si el IPC de EE. UU. vuelve a subir por encima de la estimación de los economistas, la venta de yenes podría aumentar, lo que haría más probable una intervención", dijo el analista Yoshifumi Takechi.
Recordemos que en septiembre el gobierno japonés intervino en el mercado por primera vez desde 1998, cuando el JPY cayó frente al dólar a 145,90.
Ayer, el yen cayó muy por debajo de esta línea roja y estableció un nuevo antirrécord, pero no hubo intervención. Ahora las autoridades japonesas han optado por una táctica diferente, centrándose no en un determinado umbral de precios, sino en la velocidad de caída del JPY.
Así lo anunció el miércoles por la mañana el ministro de Finanzas de Japón, Shunichi Suzuki, y poco después sus palabras fueron confirmadas por el gobernador del BOJ, Haruhiko Kuroda.
Además, Kuroda destacó ayer que el crecimiento generalizado del dólar es un problema global que debe abordarse en conjunto.
Según Kuroda, muchas economías ya han entendido esto y están listas para discutir este tema en las reuniones del G20 y el Fondo Monetario Internacional, que se desarrollan estos días en Washington.
De hecho, Kuroda insinuó la posibilidad de una intervención coordinada contra el dólar, pero el mercado ignoró su amenaza.
Después del discurso de Kuroda, la moneda estadounidense, por el contrario, recibió un impulso aún más poderoso. Al tratar de respaldar al yen, el funcionario solo empeoró las cosas, ya que no pudo evitar hacer comentarios moderados.
El jefe del BOJ confirmó una vez más su compromiso con una política monetaria ultrablanda y mantener las tasas de interés en un nivel ultrabajo.
Los principales argumentos a favor de una estrategia moderada siguen siendo los mismos: la economía japonesa aún no se ha recuperado a sus niveles previos a la pandemia y la inflación en el país aún es relativamente modesta en comparación con el estancamiento en Occidente.
El comentario de Kuroda convenció una vez más a los operadores de que las discrepancias en la política monetaria de la Fed y el BOJ crecerán, especialmente porque ahora los mercados esperan un aumento de las tasas en Estados Unidos de al menos 150 pb para el primer trimestre de 2023.
La Fed continuará su lucha agresiva contra la inflación, y esto ayudará a fortalecer aún más el dólar ya fuerte este año.
USD/JPY ahoraEl jueves por la noche, el yen alcanzó un mínimo de 146,98 frente al dólar, pero el USD/JPY se hundió ligeramente por la mañana. Al momento de escribir, el activo fluctuó dentro de un rango estrecho de 146,67-146,90.
En medio de la expectativa de un informe de inflación clave en los EE. UU., el par USD/JPY se mantiene al alza, pero los temores de una posible intervención del BOJ obligan a los operadores a ser cautelosos.
En cualquier caso, los analistas pronostican una mayor volatilidad del activo en la negociación de hoy. El principal objetivo para los alcistas será el nivel de 147, mientras que los bajistas necesitan caer por debajo de 146,66 para tomar la iniciativa.