EUR/USD. El dólar cayó en desgracia: ¿hasta cuándo?

El impulso alcista correctivo del par EURUSD parece estar desvaneciéndose. A pesar del aumento constante del precio, los compradores no pudieron probar la marca de 1,0000, que actualmente es el nivel de resistencia clave. Es probable que los operadores aún intenten superar esta barrera de precios, pero al mismo tiempo, es muy dudoso que los alcistas del EUR/USD puedan establecerse por encima del nivel de paridad para aprovechar su éxito.

El aumento de las tensiones geopolíticas, la profundización de la crisis energética, los crecientes riesgos de estanflación en la región europea: todos estos factores fundamentales siguen jugando en contra del euro. El dólar, a su vez, cayó "en desgracia" por una sola razón: las expectativas de línea dura sobre el posible resultado de la reunión de noviembre de la Fed disminuyeron inesperadamente en el mercado. Esto sucedió luego de la publicación del decepcionante índice ISM en el sector manufacturero estadounidense, que resultó estar en la "zona roja".

Sin embargo, en mi opinión, el mercado se apresuró a sacar conclusiones "dóciles". En primer lugar, aún faltan cuatro semanas para la reunión de noviembre, durante la cual se publicarán los principales indicadores macroeconómicos en el ámbito de la inflación y el mercado laboral. En segundo lugar, los indicadores de inflación ya publicados anteriormente (entre los que se encuentra el índice PCE más importante) sugieren que el regulador estadounidense no reducirá el ritmo de endurecimiento de la política monetaria. Al menos en el contexto de la reunión de noviembre.

También es imposible descartar el factor geopolítico. Ayer, en respuesta a la decisión de EE.UU. de enviar ayuda militar adicional a Ucrania, un portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia dijo que este hecho "acelera la posibilidad de un choque militar directo entre Rusia y la OTAN". En general, la situación aquí se está desarrollando a lo largo de una escalada en lugar de una espiral de desescalada, por lo que aún es prematuro hablar de una disminución del sentimiento anti-riesgo en los mercados.

Las razones del debilitamiento del dólar esta semana son situacionales. Tras la publicación de un informe débil sobre el crecimiento del índice manufacturero ISM, el mercado ha reducido la probabilidad de un aumento de 75 puntos en las tasas de interés en la reunión de noviembre. La herramienta FedWatch, que monitorea la probabilidad de un cambio en la tasa de la Fed, redujo esta probabilidad al 50 %, mientras que antes de la publicación estaba en un nivel del 70 %. En este contexto, los rendimientos de los bonos del Tesoro disminuyeron y el mercado de valores "revivió": los índices clave de Wall Street mostraron una dinámica positiva, mientras que el dólar estuvo bajo presión en todo el mercado.

Y aquí surge una pregunta lógica: ¿los compradores de EUR/USD podrán fortalecer aún más sus posiciones, basándose en fundamentos tan inestables? Tenga en cuenta que pasado mañana (es decir, el viernes) se publicarán las nóminas no agrícolas, y la próxima semana, los informes sobre el crecimiento del índice de precios al consumidor en los EE. UU. y el índice de precios al productor. Y si estos comunicados salen al menos al nivel de las previsiones, la probabilidad de que se aplique el escenario de 75 puntos en la reunión de noviembre volverá a aumentar, con todas las consecuencias que ello conlleva.

A juzgar por las previsiones preliminares, el mercado laboral no decepcionará: la tasa de desempleo en los Estados Unidos debería caer al 3,6% y el número de personas empleadas en el sector no agrícola aumentará en casi 300.000. El nivel de los salarios medios por hora también debería mostrar una dinámica positiva, habiendo aumentado un 5,2% en términos anuales. En cuanto a la inflación, también se espera un mayor crecimiento de los indicadores clave. Por ejemplo, el índice de precios al consumidor de septiembre debería subir hasta el 8,2% interanual.

Recordemos que a finales de septiembre se publicó el informe de inflación sobre el crecimiento del PCE. Como saben, este es uno de los principales indicadores de inflación que monitorea la Fed y que feflejó la aceleración de la inflación. Sobre una base anualizada, el índice de precios subyacente para el gasto de consumo personal alcanzó un máximo de varios meses en 4,9%.

Dados esos "datos de entrada", ¿podemos hablar ahora de algún requisito previo para suavizar la posición de la Fed? En mi opinión, no. De hecho, los propios representantes de la Fed no suavizan el tono de su retórica. En particular, el presidente de la Fed de Atlanta, Raphael Bostic, dijo la semana pasada que el escenario de referencia actualmente exige un aumento de 75 pb en noviembre y 50 pb en diciembre. Otros de sus colegas (incluidos Philip Jefferson, Thomas Barkin, Loretta Mester, Mary Daly) también afirmaron que están listos "para una lucha decisiva contra la inflación". Ninguno de ellos dijo que la Fed necesita desacelerar el ritmo del ajuste monetario. Al menos, en el contexto de la reunión de noviembre, no hubo tales declaraciones.

Así, en mi opinión, la subida del precio del EUR/USD tiene un carácter correctivo. Para un mayor desarrollo de la corrección, los compradores no solo necesitan superar el nivel de paridad, sino también ganar un punto de apoyo por encima de 1,0050. En este caso, la marca de 1,0000 actuará como un soporte, una barrera de precios. Pero los alcistas de facto del EUR/USD ni siquiera se han acercado a la paridad ascendente. Todo esto sugiere que el impulso alcista se desvanecerá gradualmente y, finalmente, los vendedores volverán a tomar la iniciativa. Por lo tanto, la táctica de abrir posiciones cortas en retrocesos alcistas sigue siendo la más adecuada. Los objetivos a la baja más cercanos son 0,9870 (la línea media de las Bandas de Bollinger, que coincide con la línea Kijun-sen en D1) y 0,9750 (la línea Tenkan-sen en el mismo período de tiempo).