Gas en Europa por $2500. ¿Quién tiene la culpa y qué pasará después?

El costo del gas en las bolsas al contado en Europa ha superado la marca de los 2.500 dólares por 1.000 metros cúbicos. Según estimaciones conservadoras, con una tendencia similar en el próximo invierno, el precio del gas corre el riesgo de subir incluso por encima de los 4.000 dólares.

El principal impulsor del aumento de los precios del gas en Europa son los problemas con la restauración de la operación completa del gasoducto Nord Stream que limitó significativamente los volúmenes de suministro de energía ruso al mercado europeo. La declaración del gigante energético ruso Gazprom de que las sanciones contra Rusia impiden la obtención de motores Siemens, tan necesarios para el funcionamiento del gasoducto, provocó a principios de la semana pasada una subida de los precios de intercambio del gas. Es decir, a 2100 dólares por 1.000 metros cúbicos. Además, el precio subió sin problemas y con confianza durante la semana, superando los niveles críticos recientes.

La semana actual está marcada por un crecimiento aún más acelerado. Por ejemplo, el lunes, el precio de los contratos de futuros para el suministro de gas en septiembre (según el índice TTF) superó los 2.400 dólares por 1.000 metros cúbicos, lo que sucedió por primera vez desde principios de marzo. En la apertura comercial del martes, el precio del combustible azul cruzó la marca de 2.450 dólares.

Nord Stream realiza los principales suministros de gas desde Rusia a Europa, pero desde mediados de junio han sido limitados, y desde finales de julio solo se ha suministrado el 20% de los casi 170 millones de metros cúbicos de capacidad al día. Hasta la fecha, la operación de la carretera es proporcionada por una sola turbina.

El jueves pasado, la embajada rusa en Berlín informó que el suministro de una turbina para el gasoducto Nord Stream de Canadá a Alemania no cumplía con los términos del contrato. Rusia exige confirmación de que esta y otras turbinas, que pueden requerir mantenimiento, no caerán bajo las sanciones de la UE, Canadá y el Reino Unido. Además de las restricciones al suministro de gas natural de Rusia, el cierre de las capacidades de las plantas de tratamiento de gas Norwegian Troll field y Kollsnes también contribuirán al aumento de los precios del gas debido al mantenimiento preventivo anual. Tendrá lugar desde el 13 de agosto hasta fin de mes. Como resultado, la capacidad de producción se reducirá en 20 millones de metros cúbicos de gas durante este período.

Además, el nivel de temperatura atípicamente alto en Europa eleva la demanda de electricidad necesaria para la climatización y reduce la generación de las centrales hidroeléctricas. Cabe destacar que, según la Asociación WindEurope, la generación eólica en los países de la UE se mantiene por debajo de lo normal. En verano, suele ser del 11-20 %, pero el 15 de agosto, la cuota de generación WPP estaba en el 9,5 % del volumen total. Puede que no sea el factor más importante, pero aumenta la demanda de gas. En consecuencia, el precio del mismo aumenta.