Al cierre de la semana, la divisa estadounidense experimentó una serie de caídas y alzas, perdiendo parte de sus ganancias. De momento, la suerte favorece más al euro. El euro se está fortaleciendo constantemente en medio de impresionantes informes macroeconómicos de los Estados Unidos, que demuestran un aumento de la inflación en el país, aunque a veces retrocede de los niveles actuales.
La moneda estadounidense disminuyó levemente el jueves 11 de agosto, luego de la caída anterior del 1% el miércoles, reaccionando así a la tasa de inflación en los EE. UU. Al mismo tiempo, los expertos señalaron que la inflación en el país no fue tan alta como se esperaba anteriormente. Esta situación llevó a los participantes del mercado a reconsiderar sus expectativas previas sobre la subida de tipos de la Reserva Federal.
El dólar continuó cayendo ante esto, permaneciendo en una espiral descendente después de la publicación del informe sobre los precios al productor en los Estados Unidos. Según los datos actuales, este indicador disminuyó significativamente en julio en comparación con el mes anterior. Al mismo tiempo, el número de solicitudes de beneficios por desempleo en los Estados Unidos resultó ser menor de lo que esperaban los economistas y los precios al productor disminuyeron en términos anuales. Según los analistas, esto indica una disminución significativa de la inflación.
Según el Departamento de Trabajo de EE. UU., un indicador clave de los precios industriales en el país colapsó inesperadamente en julio. Esto sucedió por primera vez en los últimos dos años, enfatizan los expertos. Las razones son una disminución en el costo de los portadores de energía y una reducción largamente esperada de la presión inflacionaria. Como resultado, el índice de precios al productor en Estados Unidos disminuyó un 0,5 % mensual y aumentó un 9,8 % anual.
La situación actual está debilitando la posición del dólar, aumentando los riesgos para el crecimiento de la rentabilidad en Estados Unidos. Al mismo tiempo, dichos riesgos continúan a la baja para el euro, a pesar de las dificultades económicas de la región. Los datos actuales de inflación en EE.UU. sorprendieron a los mercados y provocaron un repunte de las acciones y una caída del dólar. Sin embargo, los analistas de Nordea Bank dicen que el dólar está lejos de consolidarse en una tendencia a la baja. Al mismo tiempo, los especialistas del banco esperan que el euro caiga por debajo de la paridad, ya que los indicadores económicos estadounidenses eclipsan los indicadores de las economías europeas.
Los estrategas de divisas de Nordea Bank creen que en los próximos meses, el par EUR/USD pondrá a prueba el nivel de paridad. Al mismo tiempo, es posible que el par caiga por debajo de este nivel, por ejemplo, hasta el nivel de 0,9700. Actualmente, el euro se ha recuperado un 0,84% frente al dólar, superando el hito psicológicamente importante de 1,0300. Por el momento, el par cotizaba en 1,0336, pero luego retrocedió desde posiciones altas. El par EUR/USD estuvo cerca de 1,0315 en la mañana del viernes 12 de agosto. Al mismo tiempo, a pesar del reciente crecimiento del euro frente al USD, muchos participantes del mercado no están listos para abrir posiciones cortas en el dólar.
Para los mercados de EE. UU. y Europa, el tema de la desaceleración de la inflación sigue siendo relevante. Según los economistas de Commerzbank, la Fed recurrirá a endurecer la política monetaria para frenar su crecimiento. Para ello, en la próxima reunión prevista para septiembre, el banco central subirá las tasas en 50 pb, creen analistas de Goldman Sachs. Los bancos centrales utilizan todos los métodos disponibles para combatir la inflación incesante. En este contexto, la Reserva Federal de San Francisco no descarta una tercera subida de tipos consecutiva (en unos impresionantes 0,75 puntos porcentuales).
Tras la publicación del IPC (índice de precios al consumidor) en Estados Unidos, representantes de la Fed destacaron que era prematuro celebrar la victoria. Según las estimaciones del banco central, la economía estadounidense aún está lejos de alcanzar la meta de inflación del 2%. Por lo tanto, la Fed no tiene previsto frenar el ritmo de subida de tipos de interés.
Anteriormente, las autoridades monetarias de EE. UU. apoyaron al banco central para frenar la subida de tipos, pero los datos macro actuales pueden obligarles a reconsiderar sus decisiones. Según informes económicos recientes, los consumidores y empresarios estadounidenses siguen siendo una pequeña ventaja. Sin embargo, la tasa de inflación sigue siendo alta, enfatizan los expertos. En este contexto, el objetivo actual de las autoridades monetarias, a saber, la estabilización de precios, sigue siendo inalcanzable.