El BCE sube las tasas en un 0,5% y el EUR/USD baja 1500p

El Banco Central Europeo elevó su tasa de interés clave en 50 puntos básicos, la primera vez en 11 años y la mayor desde 2000. También anunció una herramienta que podría evitar la expansión descontrolada de los costos de endeudamiento, lo que ocurrió en 2012, cuando la existencia misma de el euro fue cuestionada.

Lagarde dijo que las presiones sobre los precios se están extendiendo a través de los sectores porque se ven exacerbadas por la debilidad del euro. Agregó que la mayoría de los indicadores de inflación básica han subido aún más y esperan que la inflación se mantenga alta por más tiempo.

El aumento de la tasa alinea al BCE con el impulso global de endurecimiento y pone fin a un experimento de ocho años con bajos costos de endeudamiento. El BCE dijo que la normalización de las tasas sería apropiada en las próximas reuniones, lo que llevó a los operadores a aumentar las apuestas sobre el ritmo de ajuste. Como se mencionó anteriormente, también presentó una nueva herramienta que contrarrestará la dinámica errática del mercado.

En cuanto a las tasas pasivas, se llevó a cero, que es el doble de lo reportado hace apenas unos días.

Ahora, el BCE está con otros 80 bancos, incluida la Reserva Federal de EE.UU., que ya han aumentado las tasas este año para combatir la inflación altísima.

Pero enfrenta tareas más difíciles que la mayoría porque además de establecer la política monetaria para 19 economías, tienen que lidiar con la creciente amenaza de recesión.

El BCE elevó las tasas por última vez en 2008 y 2011, pero tuvo que recurrir a esto nuevamente porque el crecimiento económico se está desacelerando drásticamente.

El aumento de las tasas muestra que la Junta de Gobernadores está actuando según las repetidas promesas de establecer una política basada en los datos económicos entrantes. Desde la última reunión de tasas en junio, la inflación ha continuado superando las expectativas. Ahora, se acerca al 10% y los funcionarios tienen que luchar para que vuelva a la meta en el mediano plazo.

Obviamente, los bancos se están alejando de las tasas negativas para impulsar su rentabilidad. Los restantes países con políticas negativas son Japón, Suiza y Dinamarca.