La volatilidad fue bastante baja el lunes debido a que algunas bolsas aún estaban cerradas debido a las vacaciones de Semana Santa. Los inversores estadounidenses también se mostraron notablemente cautelosos debido a la temporada de informes corporativos en curso, los próximos datos estadounidenses y el discurso de George Powell el jueves.
Otra razón por la que el mercado de valores de EE. UU. continúa bajo presión podría ser la expectativa de un aumento más activo de las tasas de la Fed luego de la reunión del 4 de mayo. Lo más probable es que a los inversores les preocupe si las empresas estadounidenses podrán soportar un fuerte aumento de las tasas de interés o no.
Pero para esta semana, el foco de los mercados será el informe de ganancias de United Airlines, Tesla, Netflix y American Express. Actualmente, alrededor del 7% de las empresas del S&P 500 han informado sus resultados reales del primer trimestre, y el 77% de ellas registró una mejor guía de ganancias por acción (EPS), lo que corresponde a un resultado promedio del 5%. De cara al futuro, la tasa de crecimiento de ganancias esperada para el S&P 500 fue del 5,1%. Si este impulso continúa, será la tasa de crecimiento de ganancias más baja para el índice desde el cuarto trimestre de 2020.
Obviamente, muchos inversores dudan de la capacidad de las empresas estadounidenses para atravesar un período de aumento de las tasas de interés sin pérdidas graves. Si tener un aumento del 0,25% en la tasa de interés clave ya redujo las ganancias, ¿qué más haría un aumento del 0,50%? Lo más probable es que ralentice la eficiencia de las empresas en el segundo trimestre, lo que ralentizará el crecimiento económico. El peor de los casos es una recesión profunda y prolongada.
En el lado positivo, un aumento en las tasas beneficiará al dólar, que actualmente está creciendo, aunque más lento que antes. El índice del dólar ICE ya superó los 100 puntos y no parece que vaya a bajar. El USD también aumentará en medio del crecimiento de los rendimientos de los bonos del Tesoro, que se venden activamente en medio de la reducción de las carteras de bonos de la Reserva Federal.
Por el momento, el USD/JPY ya subió a los niveles que se observaron hace 20 años, y es probable que ese no sea el límite. Lo más probable es que suba pronto a 134,50 y 145,75, lo que es una señal de que el período de "débil dólar" finalmente ha terminado.