Conflicto ucraniano-ruso, día 48. Suecia y Finlandia están listas para unirse a la OTAN.

Los principales índices de la bolsa estadounidense -Dow Jones, NASDAQ y S&P 500- terminaron el lunes con una fuerte caída. En principio, el mercado está volviendo al estado más lógico en las circunstancias actuales. Hemos dicho repetidamente que los fuertes antecedentes fundamentales y geopolíticos ejercerán una fuerte presión sobre el mercado de valores. Sin embargo, hace dos semanas, los índices bursátiles de EE. UU. mostraron un crecimiento impresionante, lo que inmediatamente dio lugar a una gran cantidad de rumores de que, de hecho, la caída no sería tan fuerte. Sin embargo, la caída del mercado basada en factores tan graves que afectarán a todo el mundo no es una caída dentro de una semana o dos. Muchos expertos coinciden en que la caída de las acciones y los índices se observará a lo largo del ciclo de subida de tasas de la Fed, por lo menos durante un año y medio. Por lo tanto, tenemos una situación en la que los índices bursátiles pueden crecer de vez en cuando, pero en general, ya ha comenzado una tendencia a la baja, que puede durar mucho tiempo.

Mientras tanto, el tema de la Fed pasa lentamente a un segundo plano. El hecho es que todos los participantes en todos los mercados ya son plenamente conscientes de que un aumento en la tasa clave de al menos 2,5% en un futuro cercano es casi inevitable. También entienden que la Fed reducirá su balance, que se ha disparado en los últimos años hasta la inimaginable suma de 9 billones de dólares. Pero con la geopolítica, todo es mucho más complicado y es extremadamente difícil predecir el futuro. Anoche se recibió información sobre el uso de armas químicas, presumiblemente gas sarín, en Mariupol, que continúa manteniendo la defensa. Esta es información aún sin verificar, sin embargo, como se supo un poco más tarde, durante el día hubo repetidos informes de que las tropas rusas se estaban preparando para usar este tipo de armas prohibidas por la Convención de Ginebra. De confirmarse los temores, podría cambiar mucho la opinión de la UE, EE.UU. y la OTAN sobre este conflicto militar. Anteriormente, el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, declaró que el uso de armas químicas por parte de Rusia "puede afectar a los países vecinos miembros de la OTAN". No está claro exactamente qué quiso decir Stoltenberg, pero no hay duda de que en este caso se pueden introducir nuevos paquetes de sanciones contra la Federación Rusa. Y dado que cada vez hay menos instrumentos de influencia en el Kremlin, las sanciones por petróleo y gas se vislumbran cada vez más en el horizonte. En cualquier caso, la desescalada del conflicto, como vemos, está fuera de discusión. También cabe señalar que, según información no oficial en la última cumbre de la OTAN, Suecia y Finlandia anunciaron su disposición a unirse a la Alianza este verano. Finlandia tiene una frontera muy larga con Rusia, y el Kremlin ha advertido repetidamente a los finlandeses que tal medida obligaría a Moscú a "reaccionar". Por lo tanto, en el verano, podemos presenciar una o dos "operaciones especiales" más.