Estados Unidos planea sacar petróleo de sus reservas estratégicas para frenar los altísimos precios del petróleo.

Actualmente, Estados Unidos está considerando sacar 180 millones de barriles de petróleo de sus reservas estratégicas para detener el aumento de los precios del petróleo. Si esto sucede, será el mayor uso de reservas estratégicas en los últimos 50 años.

En consecuencia, el WTI cayó $6, pero siguió manteniéndose por encima de los $100 por barril.

Desde que Estados Unidos impuso sanciones contra Moscú, las entregas de petróleo han disminuido a nivel mundial. Según el vicepresidente de S&P Global, Daniel Yergin, existe una alta probabilidad de que las exportaciones se redirijan a Asia, especialmente porque Europa busca minimizar el consumo de petróleo ruso. Por supuesto, esto será problemático tanto para los antiguos importadores como para Rusia.

Actualmente, el petróleo ruso representa casi el 30% de todas las importaciones de petróleo al continente y el 51% de las importaciones de productos derivados del petróleo a Europa.

Sin embargo, con todas las sanciones y prohibiciones de EE. UU. y el Reino Unido, el petróleo ruso se vende con un gran descuento a precios sorprendentemente bajos, lo que lo hace más atractivo para los principales importadores de petróleo en Asia, incluidos India y China.

India es un ejemplo especialmente bueno, ya que no suele importar mucho petróleo de Rusia. Pero dado el aumento de los precios, es comprensible que un país que consume el 85% de su petróleo a través de las importaciones esté buscando una buena oferta.

Volviendo a los EE. UU., la Administración de Información de Energía (EIA) informó una disminución en los inventarios de petróleo crudo de 3,4 millones de barriles durante la semana del informe. Los inventarios de gasolina, por otro lado, aumentaron 800.000 barriles, muy probablemente debido al aumento en la producción a un promedio de 9,1 millones de bpd la semana pasada. La EIA también dijo que las existencias de destilados medios aumentaron en 1,4 millones de barriles por semana, mientras que la producción promedió 5,1 millones de barriles por día.

Pero a pesar del aumento de la producción de combustible, los precios de las gasolineras en EE. UU. se mantienen altísimos. Algunos legisladores demócratas culpan a la industria petrolera por los altos precios, mientras que la industria responde explicando que el mercado petrolero es un mercado global y que la fijación de precios no es responsabilidad de un solo país.

Hablando de precios, la OPEP se reúne hoy para discutir su política de producción. Todos esperan que no haya sorpresas y que el cártel aumente su producción mensual en 400.000 bpd.