Goldman Sachs no está dispuesto a renunciar al oro incluso después de un sombrío 2021. El gigante financiero de los servicios de banca de inversión eleva el pronóstico de precios y recomienda una operación con oro de un año.
En su informe, el banco dice que está elevando su pronóstico de 12 meses para el precio del oro a $2150 por onza en comparación con el objetivo anterior de $2000.
La nueva perspectiva alcista surge después de un decepcionante 2021 para el oro, cuando los precios cayeron casi un 4% a finales de año. Según Goldman Sachs, la caída del año pasado en los precios del oro se debió a la fuerte actividad económica y las expectativas de que el crecimiento de la inflación será temporal.
Cabe señalar que las altas tasas de crecimiento y los precios estables llevaron al crecimiento de todos los activos de riesgo, en particular las criptomonedas. Como resultado, el oro no solo se ha enfrentado a una caída en la demanda de inversión de los inversores que ya no buscan coberturas de depreciación, sino que también se ha enfrentado a la competencia directa de Bitcoin como medio de ahorro.
Goldman Sachs predice que la mayoría de las tendencias del año pasado cambiarán este año.
Hoy, la combinación global de crecimiento e inflación es marcadamente diferente. A pesar de que todavía no se habla de una recesión, los economistas pronostican una desaceleración significativa en los EE. UU., mientras que la perspectiva inminente de un nuevo ciclo significa que no habrá riesgo en las clases de activos a largo plazo en todo el mundo. Para aquellos inversores que desean proteger sus carteras contra los riesgos de una desaceleración del crecimiento y la caída del valor, una posición larga en oro es la más rentable en las condiciones macroeconómicas actuales. Esto también se menciona en el informe.
Los analistas señalaron que el riesgo creciente es que una inflación persistentemente más alta obligue a la Fed a endurecer agresivamente su política monetaria, lo que a su vez influirá aún más en el crecimiento económico. Goldman Sachs ya ha recortado sus previsiones de crecimiento para EE. UU., ya que es poco probable que el gobierno estadounidense avance en sus planes de estímulo fiscal.
La creciente amenaza de inflación es otro factor que Goldman Sachs está monitoreando. Las preocupaciones sobre la inflación se mantuvieron bajo control el año pasado, ya que el banco central de EE. UU. descartó el aumento de los precios al consumidor como algo temporal. Sin embargo, el banco de inversión dijo que ahora existe el riesgo de que las expectativas de inflación se vuelvan infundadas ya que la inflación ha sido más estable de lo esperado.
Goldman Sachs dijo que, según el índice de inflación histórico del oro, si la inflación llega al 4%, el oro podría alcanzar los $2500 la onza. Además, el banco cree que si los ETF de oro de EE. UU. vuelven a sus niveles de 2011, el oro se acercará a este alto nivel. En consecuencia, el oro tiene un gran potencial alcista en 2022.
Los últimos comentarios de Goldman Sachs sobre el oro se publicaron antes de la reunión de política monetaria de enero de la Fed.