"Omicron": claro está que nada está claro. La incertidumbre de Covid estanca el oro

La nueva cepa COVID-19 dio un pequeño impulso al oro a finales de la semana pasada. Sin embargo, los científicos aún no pueden decir con exactitud su peligrosidad. Por ello, el metal vuelve a perder su brillo.

El oro comenzó la semana actual con una caída, ya que el pánico por el coronavirus que se apoderó de los mercados el viernes pasado se suavizó ligeramente. Los inversores respiraron aliviados tras escuchar los comentarios de los funcionarios de la Organización Mundial de la Salud.

La OMS no tiene información confirmada de que los pacientes infectados con la cepa "omicron" tengan un curso más grave de la enfermedad que los que tienen la otra subespecie de COVID-19. Tampoco está claro en este momento si la nueva variante del coronavirus es más infecciosa que las anteriores.

A finales de la semana pasada, las bolsas mundiales cayeron al conocerse la existencia de una nueva subespecie de coronavirus muy mutable, altamente transmisible y resistente a las vacunas.

Los inversores quedaron asustados por el riesgo de un nuevo cierre y buscaron protección en los activos de refugio. Como resultado, el oro alcanzó un máximo intradía de 1.816,30 dólares durante la jornada del viernes.

El lunes, cuando el pánico disminuyó un poco, la situación cambió. La atención de los operadores volvió a centrarse en las acciones. Como resultado, los tres principales índices bursátiles estadounidenses mostraron un impulso positivo. El DJIA subió un 0,68%, el S&P 500 un 1,32% y el NASDAQ un 1,88%.

En este contexto, el oro cambió de rumbo a la baja. Así, el contrato de febrero cayó ayer un 0,2%, o 2,90 dólares, hasta alcanzar los 1.785,20 dólares. Por su parte, el contrato de futuros de diciembre bajó un 0,2% hasta los 3,20 dólares al contado. Su precio final fue de 1.782,30 dólares.

Así pues, el lingote terminó por debajo del nivel psicológicamente importante de los 1.800 dólares por cuarta sesión consecutiva. La fortaleza del dólar no permite que el oro supere este nivel clave. Ayer, por ejemplo, el índice de la divisa estadounidense subió un 0,1%, hasta los 96,45 puntos. El billete verde también se vio fortalecido por la disminución de la preocupación por la nueva cepa COVID-19.

Cabe recordar que a finales de la semana pasada el dólar se fortaleció un 0,1%, mientras que el precio del oro cayó un 3,6%. El billete verde se vio apoyado por la reelección del jefe de la Fed, Jerome Powell. Los inversores esperan que, en medio del aumento de la inflación, acelere la reducción de las compras de activos iniciada en noviembre para acelerar la subida de las tasas de interés.

Los analistas destacan que los comentarios de los funcionarios del banco central estadounidense sobre el futuro rumbo de la Fed seguirán influyendo en el precio del oro a corto plazo. Además, otro factor importante serán las noticias sobre la cepa "Omicron".

– Sólo un luckdown mundial causado por la nueva variante del coronavirus podría tener un impacto significativo en el metal precioso", comentó el analista Chintan Karnani. – Si hay algún indicio de cierre total en Europa, Gran Bretaña y Norteamérica, es probable que el oro rompa el nivel de 1.900 dólares y suba hasta casi 2.000 dólares.

Pero mientras el "Omicron" siga siendo una incognita para los científicos, la incertidumbre continuará en el mercado del oro. Esto hará que los precios oscilen.