El dólar estadounidense volvió a perder posiciones antes de la apertura de la sesión de negociación estadounidense, continuando así el movimiento de corrección que comenzó el viernes. En general, esto no es una sorpresa, ya que el mercado se está preparando para la publicación de los datos de inflación de EE. UU. y aunque solo saldrán mañana, los pronósticos son extremadamente decepcionantes. Además, hoy se publican datos sobre precios al productor, cuya tasa de crecimiento debería acelerarse del 8,6% al 8,7%. Si es así, la inflación seguirá creciendo. Todo esto en el contexto de la creciente preocupación sobre el aumento global de la inflación.
Resulta que la inflación ya es bastante alta, lo que en sí mismo conlleva enormes riesgos, y seguirá creciendo. Naturalmente, nada de esto agrega optimismo al dólar estadounidense. Además, la Fed ha comenzado a comportarse de manera algo extraña, en lugar de subir la tasa de refinanciamiento lo antes posible, declaró que las tasas de interés sólo comenzarán a subir en 2023. Con base en todo lo anterior, es extremadamente probable que observemos el continuo debilitamiento del dólar estadounidense durante los próximos días.
Índice de precios al productor (Estados Unidos):
El par EUR/USD aumentó rápidamente en más de 90 puntos durante la corrección desde el mínimo local de este año. Como resultado, la cotización se acercó al área de interacción de las fuerzas comerciales 1,1600/1,1615, donde hubo un ligero estancamiento. Se puede suponer que si la cotización no se mantiene por encima del nivel de 1,1625, puede producirse un retroceso en el mercado.
El par GBP/USD ha restaurado parcialmente la tasa de cambio en relación con la reciente caída. Ahora, el nivel de resistencia de 1,3600 está en el camino de los compradores, lo que puede afectar negativamente el volumen de posiciones largas. Esto conducirá a una etapa de desaceleración y retroceso.