El dólar estadounidense está dando pasos seguros hacia la nueva semana manteniendo sus posiciones conquistadas. Los expertos señalan que el dólar recibió terreno firme mientras esperaban el discurso del presidente de la Fed, Jerome Powell, programado para el viernes 27 de agosto en Jackson Hole.
Según los analistas, el discurso de Jerome Powell definirá la tendencia del dólar estadounidense. A principios del verano, el presidente de la Fed señaló que el tema de la reducción del volumen del programa de flexibilización cuantitativa (QE) seguía siendo un tema candente para el regulador. Al mismo tiempo, se abstuvo de comentar sobre los planes futuros de la Fed para endurecer su política monetaria (PM). Se espera que los funcionarios de la Fed se orienten gradualmente hacia la finalización del programa de flexibilización. Los expertos creen que es probable que esto suceda en el simposio de política económica en Jackson Hole o en la reunión del FOMC el 22 de septiembre.
La intención de la Fed de revertir su política fácil fue un tema dominante. Por ejemplo, Robert Kaplan, presidente de la Fed de Dallas, dijo que la Fed se negaría a recortar su programa de compra de activos si se intensifica el impacto negativo de la variante delta en la economía estadounidense. Los expertos asumen que este escenario debido a que la nueva cepa de coronavirus que invade los Estados Unidos genera dudas sobre la necesidad de cerrar el programa de QE. La Fed puede posponer el programa de reducción gradual, lo que aumentará la volatilidad del dólar estadounidense.
En esta situación, el dólar experimenta algunas turbulencias pero se mantiene firme a la par del euro. El lunes 23 de agosto, la moneda de refugio seguro registró su nivel más alto en nueve meses. Causó una fuerte caída en las contrapartes del dólar estadounidense en medio del impacto de la variante delta en la economía. Principalmente, el dólar australiano y el dólar neozelandés fueron los que más sufrieron.
El dólar recibe el apoyo de las expectativas del mercado sobre la próxima reducción del programa de QE. Sin embargo, el dólar estadounidense puede perder su posición dominante en cualquier momento. Actualmente, el fortalecimiento del USD no es sostenible y el tipo de cambio está marcando la diferencia. El lunes 23 de agosto por la mañana, el par EUR/USD cotizaba cerca de 1,1719, tratando de salir de ese rango.
Los economistas del Nordea Bank creen que en un futuro cercano el dólar seguirá fortaleciéndose y, a largo plazo, el par EUR/USD podrá alcanzar los 1,1000. Según los especialistas del Nordea Bank, la reversión del programa QE no solo pertenece a los impulsores del par EUR/USD, sino también a la política monetaria adicional del Banco Central Europeo.
Los economistas del Nordea Bank esperan una reacción relativamente positiva del BCE en caso de caída del EUR/USD. "¿El BCE estaría molesto con una lectura más baja del EUR/USD? En absoluto, ya que una lectura más baja sería útil para llevar la inflación del EUR al 2% o más como se desea. Esto deja un margen decente para un movimiento a la baja en el EUR/USD, además dado que el posicionamiento aún no es pesado en USD", afirmó Nordea Bank.
Nordea Bank cree que las perspectivas de inflación relativa son en gran medida favorables para el USD frente al EUR. Según los expertos, esta situación indica una discrepancia gradual en las estrategias de la Fed y el BCE. "Esperamos la primera subida de la Fed en septiembre de 2022, seguida de otras tres subidas en 2023. Frente a las modestas perspectivas de inflación de la eurozona, no vemos ninguna subida de tipos del BCE incluso en nuestro horizonte de previsión ampliado hasta finales de 2023", dijeron los economistas del Nordea Bank.
La tensa situación con una nueva variante de coronavirus todavía actúa como un factor decisivo cuando se trata de la tendencia del par EUR/USD. Los inversores están tratando de escapar de los riesgos, por lo que compran la moneda de refugio seguro. Estas son las tendencias clave según los expertos de OANDA. El mercado no puede ignorar los problemas asociados con la variante delta y los intentos fallidos de regresar la economía al estado normal. Esto es especialmente relevante para Estados Unidos. Los especialistas de OANDA subrayan que tampoco es una buena historia para el mundo en desarrollo.