El Brent cerró por debajo de los $62 el lunes, principalmente debido a la disminución del optimismo provocada por la decisión de la OPEP de aumentar la producción en los próximos meses.
Como se mencionó anteriormente, todo esto se debe a la espantosa decisión de la OPEP de comenzar a aumentar el volumen de producción en los próximos meses. Muchos están decepcionados, porque hasta la fecha, la demanda en el mercado es inestable, por lo que un aumento en la oferta podría conducir a otro colapso de los precios.
No obstante, los cortes de suministro se reducirán a partir de mayo, por lo que la producción ascenderá a 7,3 millones, seguida de 6,6 millones en junio y 5,76 millones en julio.
Y dado que existen factores externos completamente incontrolables como el COVID-19, los precios indudablemente fluctuarán con bastante fuerza en el corto plazo.
También hay negociaciones en curso sobre el Plan de Acción Integral Conjunto en relación con el programa nuclear iraní. Anteriormente, se planeó que durante la reunión en Viena, Estados Unidos discutiera los pasos específicos que Irán debe tomar para regresar al acuerdo. Mientras tanto, Estados Unidos tiene que suavizar las sanciones contra Irán.
Este martes por la mañana, los precios se corrigieron un poco, subiendo un 0,76% (Brent) y un 0,95% (WTI). Como resultado, los precios alcanzaron los $62,62 y $59,21, respectivamente.