Los índices estadounidenses alcanzaron nuevos máximos históricos el viernes pasado, mientras los inversores continúan esperando la adopción de un nuevo estímulo estadounidense.
De hecho, el Promedio Industrial Dow Jones aumentó un 0,09%, alcanzando los 31458,40 puntos. El S&P 500 también subió un 0,47% y llegó a 3934,83 puntos, mientras que el Nasdaq Composite subió un 0,50% y cerró en 14095,47 puntos.
Resumiendo, durante la semana pasada, el DJIA aumentó un 1%, el S&P 500 subió un 1,2% y el Nasdaq Composite aumentó un 1,7%.
Las principales razones de estas ganancias son las noticias optimistas sobre el mercado laboral estadounidense, así como el crecimiento del PIB estadounidense. La posible introducción de un nuevo estímulo también hizo subir los índices bursátiles.
Pero este lunes, la bolsa de valores de Estados Unidos estará cerrada debido al Día de los Presidentes.
En cualquier caso, para decirlo con más precisión, las acciones de Coherent aumentaron un 13,8% el viernes pasado en medio de informes de que la compañía hizo una oferta para comprar otra compañía que fabrica equipos fotónicos.
Mientras tanto, las acciones de Expedia cayeron un 2,3%, luego de que la agencia informara datos del cuarto trimestre inferiores a los esperados.
Las acciones de Cloudflare también cayeron un 5,8% a pesar de que sus resultados trimestrales superaron las previsiones de los expertos.
Las acciones de Walt Disney también se hundieron un 1,7%, a pesar de observar un aumento significativo en el número de suscriptores este primer trimestre.
Las acciones de Bumble, por su parte, aumentaron un 7,3%.
La mejora del ritmo de vacunación parece haber influido también en los índices bursátiles. Los inversores continúan monitoreando la situación con el COVID-19. Por lo tanto, las inversiones aumentaron cuando el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, anunció que la administración había recibido dosis suficientes de la vacuna tanto de Moderna como de Pfizer.
Aparte de eso, la Reserva Federal de Estados Unidos también se ha comprometido a mantener una política monetaria blanda hasta que la economía se recupere.
Pero las estadísticas publicadas el viernes pasado indicaron que la confianza del consumidor en Estados Unidos cayó inesperadamente a su nivel más bajo desde agosto de 2020. Según los datos preliminares publicados por la Universidad de Michigan, el indicador cayó a 76,2 puntos, muy por debajo de los 80,8 puntos esperados.