Los expertos del banco más grande Morgan Stanley empeoró el pronóstico para el dólar estadounidense frente al yen. El estudio se refiere no solo a la situación actual, sino también a lo que se espera de la situación el próximo año. Los estrategas del banco han declarado lo que debería esperarse de las monedas estadounidense y japonesa a corto y largo plazo.
Los expertos en divisas de Morgan Stanley redujeron su pronóstico para la tasa de dólar a yen de 108 a 102 a fines de 2019 y de 98 a 94 a fines del próximo año. Al mismo tiempo, los analistas del banco agregaron la moneda japonesa a la llamada "cartera recomendada". En esta situación, los expertos de Morgan Stanley recomiendan comprar el yen frente al dólar estadounidense y la libra esterlina.
En los últimos meses, el dólar estadounidense frente al yen ha estado cayendo constantemente en medio de una disminución en los rendimientos reales de los activos estadounidenses. Según los analistas, disminuye más rápidamente que la rentabilidad de los activos europeos y japoneses. Durante las transacciones en Asia el jueves 4 de julio, el dólar estadounidense se deprecia frente al yen y apenas cambia con otras monedas.
Junto con la moneda japonesa, el euro cayó a 121,51 yenes en comparación con los 121,76 yenes del martes. El tipo de cambio del dólar estadounidense fue de 107,63 yenes frente a los 107,88 yenes del día anterior. Según los expertos de otra gran compañía financiera, Julius Baer, el deterioro de factores fundamentales limita la posibilidad de crecimiento de la moneda estadounidense. Estos incluyen la reducción potencial en las tasas clave de la Reserva Federal, que niega los beneficios del dólar estadounidense asociado con la política monetaria.
En la situación actual, los expertos de Julius Baer revisaron el pronóstico para el par EUR/USD al alza, y para el par USD/JPY a la baja. La razón de esto se basa en la creencia de los expertos sobre la falta de potencial para un mayor crecimiento de la moneda estadounidense.
Morgan Stanley cree que la situación actual recuerda a 2016, cuando las expectativas de inflación se contrajeron más rápido que los rendimientos nominales de los bonos. En ese momento, la tasa USD/JPY colapsó en un 20%, lo que llevó a un grave desequilibrio en la economía, recuerdan los analistas.